9. CIEGO DE NACIMIENTO.

Sí, ahí va el ciego de nacimiento,
a veces con porra a veces con perro,
vagando para escapar del encierro,
que a su vida ha despojado de aliento.


Sí, ahí va el ciego de nacimiento,
suave como agua, duro como fierro,
sentándose en una banca, gamberro,
loco, por cantar a los cuatro vientos.


Se le ve en el parque todos los días,
cantando a su Dios que vive en los cielos,
viviendo del vuelto de la jauría.


Tú en tu casa te miras sin anhelo,
gruñes a tu Dios de noche y de día,
y la moneda es tu único flagelo.


AÑO DE CREACIÓN: 2010.
AUTOR: Mariano Reyes.