Y pronto vi a las aguas desbordarse,
encaminándose a la gran ciudad,
aproximándose a rancho en ruindad,
con mínima intención de controlarse.
Y pronto vi a las aguas desbordarse,
arrastrando viviendas sin piedad,
asfixiando personas con crueldad,
pocos pudieron del golpe salvarse.
El tifón lo había derruido todo:
el orgullo del pueblo destrozado,
la estancia del pueblo sumida en lodo.
Mas siguió en pie cual herido soldado:
dando lo último de sí de algún modo,
y murió mas quedó su hermano al lado.
AÑO DE CREACIÓN: 2010.
AUTOR: Mariano Reyes.